¿Cómo preparar café en cafetera italiana?

Para los auténticos amantes del café, no hay nada como disfrutar de una taza caliente cada mañana, hecha con mimo y cuidado. Una de las opciones disponibles para conseguir el mejor café en casa es contar con una cafetera italiana. ¿Ya tienes la tuya? Perfecto, ahora solo tienes que conseguir el mejor tostado y empezar a prepararlo.

¿Cómo hacerlo? No te preocupes si aún no tienes las nociones básicas sobre cómo hacer café con la cafetera italiana, porque vamos a explicarte paso a paso cómo conseguir los mejores resultados cada mañana. 

¿Cómo se usa una cafetera italiana? Paso a paso 

Aunque si nunca has utilizado una pueda intimidarte un poco, realmente la cafetera italiana tiene un funcionamiento muy sencillo. Lo primero que debes saber es cómo se diferencian sus partes. 

Todas las cafeteras italianas cuentan con un compartimento inferior (donde se echa el agua), un filtro (en el que se echa el café) y un compartimento superior. La parte superior e inferior se conectan por un tubo estrecho que normalmente forma parte del filtro. 

Teniendo esto en mente, te guiamos paso a paso para que primera elaboración sea todo un éxito. 

1. Elige el café adecuado. Comienza escogiendo el café que quieras preparar. Recuerda que debe tener un punto de molido medio. Si todavía no tienes mucha experiencia, te recomiendo que busques marcas específicas para cafetera italiana. 
2. Llena el depósito de agua. El siguiente paso es llenar de agua el compartimento inferior de la cafetera, hasta la marca indicada en el recipiente (si la hay), con cuidado de que no se desborde ni quede excesivamente lleno. Lo ideal es utilizar agua ya caliente, pero si no tienes mucho tiempo puedes hacerlo con agua fría. 
3. Llena el filtro con el café. Sujetando el embudo con la mano, antes de ponerlo sobre la base, rellena el filtro con el café. No es necesario compactar el café como se hace con las cafeteras automáticas. Esto podría arruinar el resultado. En su lugar, retira el exceso con un cuchillo o una cucharilla. 
4. Monta la cafetera. Coloca el filtro con café sobre la base llena de agua, y enrosca la parte superior. Procura hacerlo con firmeza, pero sin usar demasiada fuerza. Antes de hacerlo, asegúrate de que la goma está en buen estado, sin signos de roturas o moho. 
5. Comienza a calentar. A continuación coloca la cafetera sobre el fuego o la placa de la cocina con la tapa abierta. Procura que el tamaño de la hornilla sea similar a la de la cafetera, no mucho más grande que su diámetro. Selecciona una temperatura media-baja y deja que empiece a calentarse. 
6. Cierra la tapa. Cuando veas que el café comienza a salir por el tubo de la cafetera, cierra la tapa y apaga el fuego. Retira la cafetera cuando todo el café haya terminado de salir, evitando así que se caliente en exceso. 
7. Sirve el café. Sabrás que tu café está listo cuando oigas el burbujeo típico de estas preparaciones. Sírvelo inmediatamente para aprovechar al máximo su sabor. 

¿Cómo hacer un buen café con cafetera italiana?

Como has podido ver, aunque el funcionamiento de una cafetera italiana es sencillo, hay algunos trucos que se deben tener en cuenta para hacer un buen café. El primero, por supuesto, es elegir el producto correcto. Sin un café de buena calidad, la preparación siempre será peor. 

Pero repasemos otros consejos generales que podrían venirte bien: 

• Llena el depósito con agua caliente. Esto te ayudará a evitar que los granos de café se calienten demasiado antes de la infusión, lo que hará que se conserve mejor tanto su aroma como su sabor.
• No aprietes el café. Al servir el café en el filtro, es importante que no la compactes para conseguir un mejor infusionado. 
• Deja la tapa abierta mientras se calienta el café. Esto te ayudará, por un lado, a controlar bien la infusión, comprobando que el ritmo sea estable. Además, el café no se calentará tanto, lo que te permitirá conseguir un sabor más fresco, dulce y equilibrado. 
• Mejor a fuego medio-bajo. Aunque vaya a tardar más, es mejor preparar el café a fuego medio o bajo, para evitar que el café alcance una temperatura excesiva que pueda estropear su sabor. 
• No dejes que el café hierva. Una vez que se haya acabado el proceso de infusión, aparta la cafetera del fuego para evitar que hierva. Esto puede estropear el sabor del café. 
• Sírvelo inmediatamente. El café perderá sabor a medida que pase el tiempo desde su elaboración, por lo que si no lo tomas recién hecho puede que su sabor sea más amargo y quemado. 

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