Ahora que ya conoces las diferencias entre los gofres de Bruselas y de Lieja, y has aprendido sobre el azúcar perlado, es hora de ponernos manos a la obra. ¡Vamos a preparar esos deliciosos gofres de Lieja auténticos!
120grmantequilla a cuadraditos o derretidaa temperatura ambiente
100grazúcar perlado
2cucharaditasextracto de vainilla
1/2cdasal
Elaboración paso a paso
En un bol grande, mezcla la harina con la levadura fresca desmenuzada y agrega la leche tibia. Remueve bien hasta que se integre.
Añade los huevos uno a uno, la pizca de sal, la mantequilla derretida, el azúcar granulado y el extracto de vainilla. Mezcla todo bien hasta obtener una masa suave y homogénea.
Tapa el bol con un paño húmedo y deja reposar la masa en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que haya duplicado su tamaño.
Una vez que la masa haya reposado, añade el azúcar perlado y amasa ligeramente para incorporarlo.
Precalienta la gofrera y engrasa las placas con un poco de mantequilla o aceite en spray.
Divide la masa en porciones de unos 80-100 g cada una y colócalas en la gofrera caliente, cerrándola para cocinar los gofres durante unos 3-5 minutos o hasta que estén dorados y crujientes por fuera.
Retira los gofres de Lieja de la gofrera con cuidado y colócalos sobre una rejilla para que se enfríen un poco antes de comerlos, aunque te recomiendo que los disfrutes todavía calientes para saborearlos en su máximo esplendor.