Esta sencilla receta se ha convertido en una tradición familiar, es un indispensable en cualquier reunión que hacemos, incluso hemos llegado a hacer concursos con rellenos de todo tipo desde los más tradicionales como el atún o el pollo a alguno más innovador como aceitunas, jalapeños, pepinillos o cebolla.
Es un aperitivo o entrante que se elabora a partir de huevos duros cortados por la mitad y se rellenan con una mezcla a base de yemas de huevo y otros ingredientes, como mayonesa o mostaza. Su popularidad no solo alcanza a la gastronomía española sino que se extiende a la cocina de otras culturas. Es un plato que nunca falla en fiestas, reuniones familiares, picnics y otras celebraciones.
Es una receta muy versátil y fácil de adaptar a los gustos de cada casa, ya que puedes elaborar muchas variaciones de huevos rellenos cambiando su relleno, puedes incluir ingredientes como atún, pollo, aceitunas, pepinillos, cebolla, jalapeños, tocino, queso o aguacate, uno de mis favoritos son los gratinados al horno con carne picada.
En este artículo voy a compartir una receta heredada de mi abuela, sin complicaciones ni ingredientes poco comunes… ¡y que siempre sale buena!
¿Cómo hacer huevos rellenos de la abuela?
Lo primero, hervimos los huevos hasta que estén completamente cocidos. Luego, se pelan, se cortan por la mitad y se quitan las yemas. Las yemas las mezclamos con otros ingredientes(mayonesa, mostaza, sal y pimienta) para conseguir un relleno cremoso. Este relleno se coloca de nuevo en las mitades de las claras de huevo. Para su decoración te recomiendo pimentón, aceitunas o alguna hierba fresca que tengas en casa como perejil, por ejemplo.
HUEVOS RELLENOS RECETA DE LA ABUELA
Ingredientes
- 6 huevos
- 3-4 cucharadas de mayonesa
- 1 cucharadita mostaza (opcional)
- Pimentón dulce para decorar (opcional)
- Cebollino o perejil picado para decorar (opcional)
- Sal y pimienta al gusto
Elaboración paso a paso
- Primeramente, hervimos los huevos: En una cacerola metemos los huevos y los cubrimos con agua fría. Cuando el agua llegue a ebullición, bajamos el fuego y cocemos a fuego lento durante 10-12 minutos hasta que estén completamente cocidos. Luego, retiramos los huevos del agua caliente y los colocamos en un recipiente con agua fría durante unos minutos para enfriarlos rápidamente y detener la cocción.
- A continuación, pelamos los huevos: Una vez fríos, le quitamos la piel con cuidado para que no se nos rompan las claras.
- Cortamos y vaciamos los huevos: Cortamos los huevos por la mitad a todo lo largo y, con cuidado, retiramos las yemas con la ayuda de una cuchara pequeña o un tenedor, colocándolas en un tazón aparte. Las mitades de las claras las ponemos en un plato llano.
- Preparamos el relleno: Trituramos las yemas de huevo con un tenedor hasta que tengamos un polvo fino. Agregamos la mayonesa, la mostaza (si se utiliza), la sal y la pimienta al gusto. Hay que mezclar bien hasta conseguir una consistencia cremosa y suave.
- Ahora llega el momento de rellenar los huevos: Con una cuchara pequeña, vamos rellenando los huecos de las yemas con el relleno que hemos elaborado en el paso anterior. Yo uso una cuchara pequeña porque me resulta más práctico, pero también puedes usar una bolsa de plástico con una esquina cortada o una manga pastelera con una boquilla.
- Finalmente decoramos: Puedes espolvorear un poco de pimentón dulce sobre los huevos rellenos o bien añadir cebollino, perejil o aceitunas para decorar.
- Ahora ¡toca disfrutar! Coloca los huevos en el recipiente donde vayas a servirlo. En mi caso, los prefiero fríos por lo que lo meto en el frigorífico antes de servirlos.
Notas
¿No te convence o te falta algún ingrediente?
¡Puedo recomendarte una receta alternativa! 👌
¿Cómo servir los huevos rellenos?
Para servir este aperitivo no hay muchos secretos y puedes variarlo según la ocasión o el lugar donde vayas a comerlos. Aquí te dejo algunas ideas y consejos .
- Platos y bandejas: Puedes colocarlos en un plato grande llano o bien en una bandeja de servir, asegúrate de que estén distribuidos de manera uniforme y atractiva. También puedes servirlos en un plato específico que tenga los huecos donde se mantenga cada mitad de huevo.
- Cómo decorarlos: Lo que más suelo utilizar es perejil o pimentón dulce. Pero puedes recurrir a otras hierbas frescas como cebollino o eneldo. También puedes espolvorear en vez del pimentón dulce, como he comentado antes, pimienta negra recién molida o incluso trozos de tocino sobre los huevos para darles un toque de color y sabor extra.
- Guarniciones y acompañamientos: Hacen buena mezcla acompañados de aceitunas, embutidos, verduras crudas y dips, quesos o crackers. Así tienes un entrante más completo y variado para tus invitados.
- Refrigeración: Yo prefiero servirlos fríos, por ello, te recomiendo meterlos en el frigorífico al menos 30 minutos antes de consumirlos. Esto ayuda a que mantengan su forma y se solidifiquen un poco.
- Servir de manera individual: Esta opción es perfecta para una cena más formal o con un toque elegante, puedes colocar un huevo relleno en cada plato de los comensales junto con otros aperitivos o guarniciones de los que te he recomendado antes.
Recuerda que, aunque los huevos rellenos son un aperitivo delicioso, también son perecederos. Asegúrate de mantenerlos refrigerados hasta el momento en el que vayas a servirlos, y no los dejes a temperatura ambiente durante más de dos horas para evitar el riesgo de intoxicación alimentaria.
Cómo conservar los huevos rellenos
En este sencillo entrante no debemos descuidar conservarlos adecuadamente para evitar que se estropeen. Aquí te dejo algunos consejos para hacerlo de forma segura y efectiva:
- Enfriar rápidamente: Después de prepararlos, colócalos en la nevera para enfriarlos rápidamente. Esto ayuda a prevenir el crecimiento de bacterias y mantenerlos frescos.
- Utilizar un recipiente adecuado: Colócalos en un recipiente hermético o en un plato cubierto con film transparente para evitar que se sequen o absorban olores de otros alimentos en el frigorífico.
- Mantener en frío: Deben conservarse en la nevera a una temperatura de 4°C o menos. Así se mantienen frescos y se previenen el crecimiento de bacterias.
- No los dejes fuera mucho tiempo: No los dejes más de 2 h a temperatura ambiente, ya que esto puede aumentar el riesgo de que se estropeen. Si no tienes otra opción, te recomiendo ponerlos en hielo o en un plato refrigerado para mantenerlos frescos.
- Consumir en poco tiempo: Te aconsejo consumirlos en un plazo de 2-3 días. No es recomendable guardarlos en la nevera por mucho más tiempo, ya que pueden empezar a deteriorarse y perder su sabor y textura.
- No congeles los huevos rellenos: La mayonesa y otros ingredientes de la mezcla del relleno no suelen saber igual al congelarse y pueden resultar en una textura desagradable al descongelarlos.
Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de huevos rellenos exquisitos y frescos durante varios días.
El origen de los huevos rellenos
Su origen es difícil de precisar, ya que la idea de rellenar huevos duros se remonta a varias culturas y períodos de tiempo diferentes. Sin embargo, hay algunas pistas sobre cómo este plato ha evolucionado a lo largo de la historia.
Nos remontamos a la Antigua Roma, ya eran un aperitivo popular en fiestas y banquetes. Apicio, un antiguo libro de cocina romano del siglo IV d.C., contiene una receta para huevos duros rellenos con una mezcla de yemas, aceite de oliva, vinagre, pimienta y otras especias.
Durante la Edad Media, se volvieron populares en toda Europa, con diversas variaciones tanto de recetas como de presentación. En España, los huevos rellenos (huevos a la reina) tienen influencias de la cocina morisca y suelen llevar ingredientes como aceitunas, alcaparras y pimientos. En Francia, los œufs mimosa se rellenan con una mezcla de yemas de huevo, mostaza y mayonesa, y se decoran con yemas de huevo ralladas por encima.
En los Estados Unidos, cobraron popularidad en el siglo XIX y se han convertido en un aperitivo clásico en reuniones familiares y celebraciones. La receta básica de los huevos rellenos americanos suele incluir ser muy similar a la española y se condimenta con pepinillos encurtidos o cebolla picada.
Aunque no su origen no se puede atribuir a una cultura o país específico, está claro que el concepto de rellenar huevos duros ha sido adoptado y adaptado por diferentes culturas a lo largo de la historia, lo que ha resultado en un aperitivo de gran variedad de sabores y presentaciones.
