La respuesta corta es sí, se puede hacer mayonesa sin batidora.
Para hacer mayonesa casera sin una batidora solo vas a necesitar algo más de tiempo y esfuerzo por tu parte, pero es posible si usamos un batidor de varillas manual, o también conocido como globo, o incluso un tenedor. Aunque en mi experiencia me ha resultado más efectivo el batidor de varillas manual que el tenedor. Más abajo, te explico el paso a paso.
Lo más importante… el aceite
Al hacer mayonesa casera, es importante que elijamos un aceite con un sabor suave y neutro, ya que un aceite, como por ejemplo el de oliva virgen extra, con un sabor fuerte puede abrumar el sabor de la mayonesa. Te dejo algunas propuestas de aceite, en mi caso el que suelo utilizar es el de girasol.
- Aceite vegetal: Es una mezcla de varios aceites, como el aceite de soja, de maíz y de girasol. Es una opción común y barata dado su sabor neutro y su capacidad para emulsionar fácilmente.
- Aceite de girasol: Es un aceite ligero y neutro que también funciona bien para hacer mayonesa. Es mi favorito y una de las alternativas más habituales en las recetas de mayonesa casera.
- Aceite de canola: Es otro tipo de aceite neutro, con sabor suave y es más saludable que otros aceites, ya que es bajo en grasas saturadas y alto en grasas monoinsaturadas.
- Aceite de uva: Es un tipo de aceite ligero y suave aunque es más difícil de encontrar en algunas zonas y es un poco más caro que otros aceites que he mencionado anteriormente.
Mi recomendación principal es que evites utilizar aceites con sabores fuertes, como el aceite de oliva virgen extra, el de coco o el de sésamo, ya que pueden darle a la mayonesa un sabor demasiado intenso.
¿Cómo hacer mayonesa casera sin minipimer?
Hacer mayonesa sin batidora es fácil y solo necesita que dediquemos algo más de tiempo y esfuerzo. Necesitamos un tazón, un batidor de varillas manual (o un tenedor) y los siguientes ingredientes:
Tiempo total: 15 minutos
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En un tazón, separamos la yema del huevo de la clara. Desechamos la clara o guardamos para otro uso.
Primeramente, batimos con el batidor de varillas o un tenedor hasta que la yema esté suave.
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Agregamos una pizca de sal y una cucharadita de jugo de limón (o vinagre) a la yema de huevo.
A continuación, añadimos la sal, pimienta y el zumo de limón (o vinagre), y lo batimos hasta que todo quede bien integrado y mezclado.
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Comenzamos a añadir el aceite gradualmente en un hilo muy fino y sin parar mientras batimos constantemente la mezcla de yema.
Es importante añadir el aceite lentamente y batir enérgicamente para que la mayonesa emulsione correctamente. Si agregamos el aceite demasiado rápido, la mezcla se separará y no se formará la mayonesa.
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Continuamos batiendo y agregando el aceite lentamente hasta que hayas incorporado aproximadamente la mitad del aceite.
En este momento, la mezcla debería comenzar a espesarse y tener una textura similar a la mayonesa.
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Si quieres una mayonesa más suave, añade un poco más de zumo de limón o vinagre y continúa batiendo.
Luego, sigue agregando el aceite restante de forma que caiga como un hilo fino mientras batimos hasta que logremos la consistencia deseada.
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Probamos la mayonesa y ajustamos los condimentos según nos guste, añadiendo más sal, pimienta, zumo de limón o vinagre si es necesario.
Cuando hayas conseguido el sabor y la consistencia que nos gusta, pasa la mayonesa a un recipiente hermético y guárdala en el frigorífico. Por norma general, la mayonesa casera aguanta hasta una semana en la nevera.
Herramientas:
- Batidor de mano de varillas o tenedor
Materiales: 1 huevo (preferiblemente a temperatura ambiente) 1 taza de aceite (aceite vegetal, de girasol o de canola) 1-2 cucharaditas de zumo de limón o vinagre Sal y pimienta al gusto
Es importante que tengamos en cuenta que cuando hacemos mayonesa casera, empleamos huevos crudos. Para minimizar el riesgo de salmonela, debemos asegurarnos de utilizar huevos frescos y de buena calidad, y refrigerar la mayonesa inmediatamente después de prepararla.
