¿Qué gasta más el horno o la freidora de aire?

¿Qué gasta más la freidora de aire o el horno?

La freidora de aire se ha vuelto el electrodoméstico de moda en los últimos años, por eso seguro que te has planteado alguna vez adquirir una. Pero ¿merece la pena?

Una de las preguntas que más nos hacen es si consume la misma energía que un horno convencional, porque eso finalmente afecta a la factura de la luz. 

Te voy a hacer un spoiler: uno consume bastante más que el otro. ¿Quieres saber cuál? Venga, que te lo cuento. 

¿Qué consume más el horno o la freidora de aire?

tostando pan en el horno

En general, la freidora de aire consume menos energía que el horno tradicional. La airfryer usa tecnología para que fluya el aire caliente a alta velocidad para cocinar los alimentos de forma rápida y eficiente. Eso requiere menos energía que calentar un horno completo, que suele ser más grande y menos compacto. 

Además, la freidora sin aceite es capaz de cocinar los alimentos en pocos minutos a diferencia de un horno, lo que contribuye a gastar menos luz. 

Aunque tienes que tener en cuenta que el consumo de energía depende mucho del tipo de modelo que elijas. Las freidoras suelen consumir 700w, pero también pueden llegar hasta los 2000w. Los hornos, por su parte, suelen rondar entre los 2000w y los 5000w. 

Tips para consumir menos energía con tu freidora u horno

Qué freidora sin aceite comprar

Como ya he dicho, aunque uno gasta más que el otro, todo depende de cómo lo uses y del modelo que escojas. Te voy a dar algunos consejos que te van a venir bien: 

  1. Eficiencia energética: antes de comprar una freidora u horno, verifica las etiquetas de eficiencia energética y elige la de menor consumo, que es la A+++. O al menos la que más se acerque a dicha categoría. 
  2. Tamaño adecuado: elige la capacidad adecuada a tus necesidades. Si solo vas a cocinar para una persona, ¿para qué quieres un tamaño adecuado para seis personas? Cuanto más pequeño sea el espacio que tenga que calentar, menos energía gasta. 
  3. Precalentamiento eficiente: en el caso del horno, no hace falta precalentarlo durante mucho tiempo. Con hacerlo durante unos 10 minutos suele ser suficiente. Además, te aconsejamos que utilices el espacio para cocinar varios alimentos juntos y aprovechar el calor residual. 
  4. Utensilios adecuados: escoge recipientes que conduzcan bien el calor para que tarde poco en cocinar. El vidrio y la cerámica son los más eficientes para el horno, mientras que los de metal son los más recomendados para la freidora de aire. 
  5. Temporizador y apagado automático: si usas estas opciones vas a evitar gastar innecesariamente energía. Cuando el aparato haya terminado de cocinar, se apagará solo y no tienes que preocuparte de que se quede encendido gastando energía. 
  6. Limpieza regular: cuando el aparato está limpio tiene un buen rendimiento y eso afecta a la eficiencia energética. Así que, mantenlo libre de grasa y suciedad. 

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