Las cocinas son cada vez más pequeñas y cada vez las saturamos más de pequeños electrodomésticos, hasta el punto de que la encimera se convierte en un verdadero Tetris.
Freidoras sin aceite, batidoras, gofreras… y el ya imprescindible robot de cocina han llegado para quedarse, ya que nos permiten ahorrar tiempo y esfuerzo, pero el no tenerlo a mano puede hacer que lo usemos menos de lo que en principio pensamos.
Para rentabilizar la inversión, hay que evitar su almacenamiento en el interior de un armario, ya que puede resultar un tanto fastidioso tener que sacarlo diariamente para cocinar tus platos favoritos. Por ello, en este post no solo te vamos a dar algunas ideas de donde puedes colocarlo con total acierto, es decir, de forma cómoda y segura en tu cocina, también te vamos a detallar donde nunca es recomendable situarlo.
En primer lugar, valora qué tipo de robot de cocina necesitas
En el mercado existe una gran variedad de marcas y modelos de robots de cocina, cada uno de ellos con diferentes prestaciones y funciones, por ejemplo: cocción, picar y triturar, rallar, cortar, amasar, batir, elaborar salsas, licuar… por lo que antes de elegir un producto en concreto, lo más importante es que valores tus necesidades reales.
Cuando hablamos de necesidades, no nos referimos exclusivamente a tus necesidades de cocinado, también tienes que valorar el resto de electrodomésticos que ya tienes en tu cocina y el espacio del que dispones para su uso. Únicamente así podrás elegir con total acierto el mejor robot de cocina para ti, el que mejor se adapte a tus circunstancias personales.
En todo caso, para que estos dispositivos puedan funcionar correctamente y sin imprevistos, es necesario elegir adecuadamente el lugar donde ubicarlo. Hay que tener claro que estamos ante unos aparatos voluminosos que suelen ocupar bastante espacio, por lo que si tu cocina es muy pequeña, el tamaño del robot es un aspecto que no puedes obviar.
¿Qué debes tener en cuenta antes de utilizar el robot de cocina?
Como puedes suponer, este tipo de electrodoméstico está diseñado para ser programado y pueda ser capaz de trabajar sin ningún tipo de supervisión. Pero para hacer un uso seguro de este aparato es muy importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Ubica el robot de cocina cerca de una toma de corriente y sobre una superficie que sea plana y totalmente estable.
- Evita colocarlo cerca de otros electrodomésticos.
- Por pura precaución, para prevenir posibles accidentes no lo sitúes nunca cerca del fregadero ni de ninguna otra fuente de agua.
- Procura que los rayos solares no incidan directamente sobre el aparato.
- Si tu placa es de inducción, debes alejar el robot lo suficiente de ella para que el campo magnético no le afecte.
- Nunca uses un material textil como base para el robot de cocina, ya que se puede recalentar y dar lugar a una situación peligrosa, sobre todo cuando no se tiene supervisión durante su funcionamiento.
- Asegúrate siempre de que la superficie donde utilizas el robot esté bien seca.
- Si tienes niños pequeños y/o mascotas, por seguridad, deberás mantenerlos alejados del robot de cocina. Si los niños realizan alguna receta, siempre deben hacerlo bajo la supervisión de un adulto. Debemos tener claro que estos dispositivos electrónicos generan calor y una incorrecta manipulación del mismo puede dar origen a un accidente.
Aclarados estos puntos, pasamos a contarte dónde puedes colocar tu robot de cocina para darle el mejor y más seguro de los usos.
Correcta ubicación del robot de cocina
Si tienes una cocina de gran amplitud, casi con total seguridad que no tendrás problemas para buscarle el hueco perfecto a tu nuevo asistente. Pero la cosa cambia radicalmente cuando la cocina es pequeña, ya que el espacio disponible, tanto para ubicar el robot como para manipular los alimentos, suele ser bastante escaso.
No te preocupes, hay soluciones y te las vamos a contar.
Sobre la encimera
Lo más práctico y cómodo es colocar el robot de cocina sobre la encimera, en un lugar accesible, que resulte cómodo de utilizar y que no estorbe (aunque no esté en funcionamiento).
De igual forma, si no quieres tener molestos cables por medio, deberás tener en cuenta las tomas de corriente que tienes disponible y situar tu robot cerca de una de ellas.
Pero si tu cocina es de dimensiones reducidas, esta opción puede que sea inviable y tendrás que recurrir a cualquiera de las ubicaciones que a continuación te proponemos.
En un armario o estantería
Aunque somos conscientes de que no es la solución perfecta, guardar el robot en un armario o en una estantería es una opción perfectamente válida para quienes cocinen con este electrodoméstico de forma esporádica.
En cambio, si tu intención es la de cocinar diariamente con este aparato, el hecho de que no sea accesible puede revertir en que lo utilices menos de lo que en principio piensas.
Sobre la placa vitrocerámica
En el caso de que tengas que sacar tu robot del armario y no cuentas con el espacio suficiente de encimera como para que puedas cocinar con comodidad, una alternativa es la de colocarlo sobre una tabla encima de la placa vitrocerámica.
En este caso, el robot también quedaría justo debajo de la campana extractora. Aunque en principio se puede llegar a creer que es una ubicación muy funcional, lo cierto es que esta práctica no es muy recomendable. ¡Te vamos a explicar los motivos!
Pues bien, cuando estos aparatos están en funcionamiento es muy normal que realicen pequeños movimientos o vibraciones que, con el tiempo pueden crear fisuras o arañazos en la placa.
Por otro lado, también existe el riesgo de manipulación accidental de los mandos de la vitro que pueden ocasionar daños irreparables en tu robot por un sobrecalentamiento del mismo.
Sobre una mesa
Colocar el robot de cocina sobre una mesa disponible en la cocina es una opción que permite aprovechar al máximo la superficie de la encimera con lo que podrás elaborar tus alimentos sin grandes dificultades.
Eso sí, para poder enchufarlo sin tener que recurrir a incómodas alargaderas tendrás que tener en cuenta las tomas de corriente con las que cuentas.
Conclusión
Después de haber leído todo lo expuesto, habrás llegado a la conclusión de que existen diferentes opciones para colocar con acierto y de forma segura un robot de cocina. Si a pesar de todo no encuentras el lugar perfecto, lo más recomendable es que lo guardes en un lugar en el que esté bien protegido.
De igual forma, si no vas a usarlo de manera continuada, este aparato terminará por ser un estorbo en tu encimera más que una solución, por lo que también es recomendable que lo guardes en el interior de un armario.
En gran medida, la ubicación del robot va a estar determinada por el uso que le vayas a dar y por el tamaño del que dispones en tu cocina. No obstante, es importante que el lugar elegido para utilizarlo con seguridad cumpla con unos requisitos, entre ellos:
- No usarlo en sitios cerrados
- Un espacio amplio que te permita cocinar con comodidad
- Evitar la cercanía de los campos magnéticos (placa de inducción)
- No estar cerca de una fuente de agua
- Que la luz solar no incida directamente sobre el dispositivo
- No cubrir con ningún material textil.
